Cultivar a través de los años el dibujo, la pintura, la fotografía, el teatro y la escritura creativa, ha sido una forma estimulante de conocimiento, que también han hecho de mi existencia un lugar algo más hermoso y agradable de vivir. Pero todo ese acontecer no era suficiente, por lo que me aboqué a explorar en busca de aquello que llenará ese vacío existencial que aún permanecía en mi vida, y que llamé El Aphoran Perdido.

Un proceso de búsqueda de casi dos décadas, enriquecido con hechos hermosos e iluminadores que me develaron lo esencial a pesar de mi propias contradicciones. Por ello, me siento agradecido y dispuesto a compartir mis hallazgos, que pone en primer lugar la toma de conciencia de dos formas de creación que pueden coexistir sin negar la autoría de ninguno de sus creadores.Entendí también que esta decisión de enunciar de forma pública mi nueva experiencia, requería una gran convicción, pues desde hace mucho tiempo el mundo artístico como el científico se niega de una o de otra forma a aceptar esa posibilidad. Además comprendí que si no compartía mi nueva visión, vanos serían mis intentos de hallar una experiencia plena que me librara de una existencia fragmentada, huérfana de verdadero gozo y porvenir.

En ese proceso me enfrenté en primera instancia con mi propio ser, no porque sea difícil en el campo de la lógica, inferir en la naturaleza la mano inteligente de un Creador, sino por la lucha espiritual que implica reconocer su soberanía. Un conflicto que se da en el alma de modo inevitable, pues el corazón se resiste de forma natural a ello, pues una entrega real implica sacrificar el yo.

Aceptar al Dios bíblico demanda honestidad intelectual, pues iniciar el estudio de los textos sagrados demanda abandonar los prejuicios. Ese proceso no fácil de alcanzar, generó con los años un situar mi trabajo creativo en relación con una nueva realidad:

En este contexto quiero hablar de la Poiesis con mayúscula (Ποίησις=Creación) pronunciado «poíesis» un término griego que significa «creación» o «producción», derivado de ποιέω poieō , «hacer» o «crear»

Por lo general no tenemos dificultad en reconocer a un autor y su derecho de propiedad intelectual, sea un escritor, un poeta, un pintor o un escultor, pero con el Creador del cielo y la tierra, la gran mayoría lo evita. Aunque sí acepta el mundo del Arte, que los fenómenos que la sostienen provienen de la naturaleza. En ese contexto tal vez podemos afirmar que la poesía deriva necesariamente de lo preexistente.

Al reconocer sin ambages a un hacedor de carácter Divino, los límites de mis posibilidades se acrecentaron de modo exponencial. Percibir por ejemplo que el amor o el gozo es el fundamento de la Poesía y éste como un reflejo de Dios, es una de las consecuencias de tal acción. Pero para llegar a ese estadio de comprensión, hay que despojarse del orgullo y en algunos casos desechar ideas evolutivas del origen de la especie humana, y aceptar que la gran complejidad existente en la naturaleza y el cosmos obedecen a una mente inteligente: a un Gran Diseñador. Este acto de aceptar la soberanía divina en relación con mis afanes de carácter estéticos, configura lo que llamo...

APHORANISMO

Cosmovisión que busca armonizar dos esferas creativas. La humana, en tanto ésta habita los procesos estéticos asociados al lenguaje en armonía con la contemplación de la Poiesis mayor. Una mirada que se espacia con asombro en las obras de un Dios creador, que ha hecho posible la existencia de este planeta y el cosmos. Una revelación que será enriquecida por las Sagradas Escrituras, fuente de conocimiento de un Creador tierno y omnipotente, digno de ser adorado, que tiene el deseo de modificar nuestro ser, si así lo deseamos, y transformarnos en un poema perfecto, idóneo para habitar una tierra perfecta.

Con ese deseo espiritual ajeno a una visión materialista de la vida, con un pensamiento basado en un estudio comparado de dos textos esenciales como son las *Sagradas Escrituras y la Naturaleza,lograba lo que me era necesario alcanzar, una explicación cabal del porqué de la existencia de la muerte y el dolor, además derrumbar pensamientos que pretenden cuestionar moralmente a Dios.

El ejercicio de amalgamar una información de carácter espiritual como la contenida en las Sagradas Escrituras, con la información obtenida por los sentidos al entrar en contacto con la Naturaleza, catapultó mi mente hacia una nueva luz de lo que es Dios, y fortaleció mi pensamiento de que es posible una vida gozosa, sustentada en la promesa divina de una Metamorfosis (Poiesis Sobrenatural).

Un estudio comparado que responde preguntas tan importantes, como las que dejará inmortalizadas en una de sus obras el pintor Paul Gauguin, titulada: "¿De dónde venimos? ¿Quiénes somos? ¿Adónde vamos?"

EN BUSCA DEL APHORAN PERDIDO

Comenzaba un nuevo siglo (el año 2000) mientras disfrutaba de mi trabajo en el área de la fotografía en varias de sus vertientes profesionales. Experiencia que me llevó a laborar en dos Universidades como docente en la cátedra de Fotografía Periodística. Época cuando concreté la fundación de Benelli Studio, con la finalidad de realizar talleres tanto básicos como avanzados de fotografía y atender además las exigencias propias de la producción fotográficas publicitaria, y el desarrollo de mi trabajo artístico con la fotografía.

Mi mayor afán en los años finales del siglo XX y comienzo del XXI, fue conciliar mi mundo artístico, docente y profesional al interior del mundo de la fotografía. En esa época nació mi interés por investigar sobre los efectos que tiene la imagen sobre la psique humana, lo que se me dio en convergencia con una búsqueda de índole espiritual.

Fotografía Gabriel Benelli

Reimaginar la imaginación

En ese contexto diseñé a comienzos del año 2001 en la Universidad San Sebastián, en la ciudad de Concepción el taller "La fotografía más allá de la técnica, en busca del Aphoran perdido" que tendría como corolario un viaje hasta Machu-Picchu. Una travesía llena de aventuras que realicé junto a mi hijo Gabriel, lo que está reflejado de alguna forma en la obra teatral "La Montaña" que pueden descargar desde la página "Escritos" junto al pequeño ensayo "Reimaginar la imaginación". Intentos de reunir aspectos estéticos junto a conceptos espirituales que con el transcurrir del tiempo descubrí como posibles, sólo acompañado de una Poiesis sobrenatural.

Transcurren los primeros años del nuevo siglo, y surge una revolución con el cambio tecnológico en la fotografía, la llamada era digital, lo que significó modificar muchas cosas en los proceso que por siglo permanecían inalterados. Esto se sumó a mi nueva mirada del fenómeno de la imagen fruto de mi investigación, con la que tomé conciencia del poder de salud o enfermedad que tienen las imágenes, lo que me persuadió a tomar distancia de algunas de sus áreas de producción, hasta que por múltiples razones, lentamente abandoné la actividad para transitar por una breve temporada en el teatro como productor, director y dramaturgo. Iniciando en esos años mis acciones como gestor cultural y retomando el 2007 una antigua producción radiofónica en Radio Universidad de Concepción, que databa de 1990, pero que al segundo año el 2008, ya tenía un marcado enfoque en el poema y la poesía.

Fue un enriquecedor ejercicio difundir a través de "Flashback" la obra poética de muchos autores, lo que me permitió también vincularme con una gran cantidad de poetas de América y Europa, en paralelo a mis procesos de crecimiento como poeta.

Con el pasar del tiempo junto a la difusión de la obra de mis poetas invitados, fui tomando conciencia de la necesidad de crear instancias de introspección entre los jóvenes por medio del ejercicio de la escritura del poemas en el aula, de modo de acercarlos a un fenómeno que tiene la capacidad maravillosa de ayudar al desarrollo cognitivo, emocional y espiritual del ser humano al ponerse el ser en contacto con la poesía.

El año 2013, había tomado de súbito conciencia de la inquietante ausencia de los jóvenes en lecturas poéticas o recitales. (Había un evidente problema en la educación) Fue así que configuré un encuentro de poetas nacionales, para reflexionar sobre la evidente ausencia de una verdadera Educación Poética en las aulas de Chile, que denominé Claustro de Poetas, que luego pasó a llamarse "Claustro las Animas" (2015) nombre del fundo donde se realizó el encuentro en la localidad rural de Copiulemu,

Este es el elemento fundacional para crear el proyecto "Educación Poética para Chile" (2017) luego en el año 2018 creo los "Festivales Internacionales de Poesía del Biobío" (FIPBB) diseñados para dar también espacio a los jóvenes, complementado estos proyectos con "Poetic Education for the World" (2020) el que se cristaliza como efecto de la realización de los FIPBB fuera de las fronteras de Chile el año 2019, en la ciudades de Berlín y especialmente el realizado en Nueva York.

Pero qué sentido adquiere el Aphoran en mi intento de relacionar lo estético a lo espiritual al bautizar el Taller "La Fotografía más allá de la Técnica, en Busca del Aphoran Perdido" Pues bien, con el tiempo alcanzará un significado insospechado. Una palabra que desde el primer momento que la conocí en el texto de William Barclay "Palabras griegas del Nuevo Testamento" me hizo conectar con el anhelo más profundo del corazón humano, aquel sueño de vivir la existencia sobrepujado por el gozo, donde el asombro o el estar maravillado en este mundo cruel y egoísta sea posible, a pesar de la oscuridad que lo inunda, elaborando para ello un pensamiento que reuniera en una esfera lo estético y lo espiritual.

Mi primer intento por lograr mi cometido fue a través de ideas provenientes del misticismo oriental: es decir alcanzar un bienestar espiritual por medio de la toma de conciencia a través del yo. El escrito "Reimaginar la imaginación" descansa en el ejercicio de crear un modelo espiritual que tiene por objeto el fenómeno de la visión, y su significativo efecto en el comportamiento humano. Pero como ya lo señalaba, descansa en la pura fuerza humana. Aunque hay un pequeño atisbo en el escrito sobre la posibilidad del fenómeno de la fe.

La fuente principal de apoyo para intentar elaborar algo así como un sistema espiritual, fue en gran medida la información científica del campo de la psicología, que proporcionaba una amplia gama de fenómenos susceptibles de alimentar un estilo de vida si estos se tomaban en cuenta. Pero nuestra naturaleza pronto se encarga de enseñarnos que el conocimiento de variables tan numerosas y sutiles, hace imposible (desde el Yo) vigilar y dominar todo a partir de la sola voluntad humana. Es decir por algún lugar siempre emergerá nuestra débil humanidad impotente para dominar de modo pleno sus apetitos y pasiones.

Fotografía Gabriel Benelli

NOTA: Platón define en El banquete el término poiesis como «la causa que convierte cualquier cosa que consideremos de no ser a ser».

"Santa Biblia, canción de cuna de los pueblos, eterna nodriza con candor y sabiduría, te necesito para siempre. No me dejes. Siempre seré demasiado niña para que me parezcas ingenua; siempre me bastarás hasta colmar mi vaso hambriento de Dios." Gabriela Mistral (Premio Nobel de Literatura)

LUMINOSA SOMBRA

Una sombra luminosa, y sombra en cuanto siempre está ahí en la naturaleza para influenciar al ser humano: Poiesis preexistente, que ha motivado al ser humano a explorar y descubrir sus secretos. Luego por ejemplo el artista pintor, con el conocimiento en particular de ciertos fenómenos, trabaja el lienzo y así logra configurar una obra maestra para el arte.

Los impresionistas sabían muy bien que en la sombra existe luz, una gama de colores que supieron trabajar en sus pinturas, dando al espectador un goce del color, como nunca antes se había presenciado en el lenguaje poético de la pintura.

Poco a poco entendí que mi propio camino en busca de la felicidad se vería truncado nuevamente por el fracaso, si no consideraba en la debida forma el vocablo Aphoran, que alguna vez había llamado tanto mi atención en aquel libro de palabras del antiguo griego.

Una palabra que me invitaba a fijar la mirada en algo en particular y a vivir con asombro y admiración, pero que de una u otra manera evitaba. En ese tiempo imaginaba que mi arte debía ser el objeto de toda mi devoción, que junto a un estilo de vida saludable me sería posible alcanzar la anhelada felicidad. Pero todo mi esfuerzo no iba en la dirección del enfoque que se intentaba enseñar con el uso de la palabra Aphoran, que invitaba a mirar a alguien en concreto y que la impregnaba de un inigualable valor espiritual.

Cito del libro de William Barclay "Palabras Griegas del Nuevo Testamento" (Edición 1977) publicado originalmente en inglés bajo el título New Testament Words (1964) a propósito del significado literal de Aphoran, página 42.

horan significa "ver" o "mirar", y Apo que es la primera parte quiere decir "de lejos", y las dos partes unidas: "Mirar algo de lejos a fin de fijar nuestra mirada en una cosa en particular"

"El ejemplo importante deAphoran está en Hebreos 12:2, donde se nos manda "poner los ojos en Jesús". VP dice "fijemos nuestra mirada en Jesús", y la Versión Reina Valera, revisión de 1960, "puestos los ojos en Jesús". (ἀφορῶντες) en su comentario sobre Hebreos, sugiere la traducción "no teniendo ojos nada más que para Jesús". La idea es que hemos de apartar nuestra mirada de todo lo demás para fijarla en Jesús." El otro lugar donde lo emplea Pablo, se encuentra en Filipenses 2:23 (ἀφίδω) en el original griego.

Con la finalidad de captar todo el sentido de este vocablo, te invito a conocer lo que el autor del libro señala de su uso en griego, página 43.

"Luciano la usa respecto de un hombre que está mirando atentamente a otro cuyo argumento sigue. Epicteto utiliza esta palabra dos veces. Una, especificando las aspiraciones que tiene para sus alumnos: "Por tanto, ahora yo soy vuestro maestro, y vosotros estáis aprendiendo en mi escuela. Y mi propósito es hacer de vosotros una obra perfecta: seguros contra la cohibición, la compulsión y el impedimento; libres, prósperos, felices, teniendo en cuenta (Aphoran) a Dios en toda obra que iniciéis, ya sea grande o pequeña". Después presenta al gran héroe y benefactor Hércules, que "contaba" con Zeus para todo lo que emprendía. Josefo describe la muerte de Aarón y dice que la multitud lo "miraba maravillada" (Aphoran).

Todo este contenido nos da una magnífica imagen de la forma en que el verdadero cristiano ha de mirar la santidad de Dios y la maravilla de Jesucristo, esto es: con absoluta fijeza y total concentración; con extraordinario asombro; como el que contempla admirado un campeón y un salvador; como el que examina un proyecto magistral que es modelo de vida; como el amado que mira arrobado a su amante; como el hombre que mira a su amigo íntimo; como el hombre que mira a Dios cuando Dios ha llegado a ser para él la única realidad de su vida"

"Fijar los ojos en Jesús" fue la invitación que resistí durante años. A no ser por los intentos fallidos en mi juventud y luego en una edad más madura. Así mayormente viví alejado de Aquel que tiene el poder para conceder la plena felicidad, lo digo porque hoy, estoy convencido por múltiples razones de esa verdad.

Creí por mucho tiempo que con mi inteligencia y mis fuerzas podría encontrar el Aphoran Perdido. No discernía que una experiencia de tal magnitud no es posible obtenerla sólo con las capacidades humanas. Sólo podría aspirar a la esperiencia de los antiguos griegos sujeta a la debilidad humana, obteniendo sólo una experiencia pasajera.

Hoy, en cambio todo es diferente al estar este verbo revestido de un significado eterno. Este fenómeno sólo puede ocurrir cuando fijamos la mirada (Aphoran) en la persona de Jesús, en ese instante es cuando adquiere un valor inconmensurable, lo que luego se traducirá en una actitud y un modo de vida que nos permitirá recuperar poco a poco lo perdido, hasta llegar a alcanzar la plenitud en algún momento de nuestra historia personal. De tal modo que está en nuestras manos el privilegio de maravillarnos en el carácter de Jesús y transformarnos poco a poco a su semejanza; lo que es posible alcanzar sólo con un corazón como el de los niños que subían a sus rodillas para escuchar sus enseñanzas.

Como puedes apreciar no hay relatividad en mis palabras, en contraste con un mundo altamente secularizado que desborda incredulidad como consecuencia de la falsa religión; la que desprestigía el verdadero sentido del cristianismo. Con este comentario sólo intento poner en contexto lo que muchos de los individuos ligados al arte han conocido en sus vidas, esto es la crueldad e hipocrecía de la falsa religión. Por ello, consciente de esta realidad, este discurso busca también ser una invitación para examinar la posibilidad de que hayamos sido engañados, y por lo tanto invito a investigar y a conocer otras posibilidades a través del Aphoranismo.

Cosmovisión

Desde la elevada dimensión que adquiere la palabra Aphoran en la Carta a los Hebreos de Pablo de Tarso, se transforma con el pasar del tiempo en mi vida en una semilla que cristaliza una cosmovisión muy personal, donde la poesía como creación humana sensibilizará profundamente el alma humana, siempre y cuando vaya acompañado de un reconocimiento de la existencia de un Creador y Artista Omnipotente, entendiendo entre otras cosas que nuestra obras artísticas sólo son posible por las leyes que Él dejó en su creación, la que permite crear y articular en muchos soportes artísticos y multiplicar así la poesía.

Testigos en un mundo cada vez más corrupto y violento, somos llamados a crear instancias para guiar a la juventud hacia esferas más nobles, creando instancias donde los jóvenes tengan una experiencia real con la poesía, haciendo de la escritura del poema por ejemplo un instrumento de carácter espiritual y estético, que adquiera una dimensión integradora sobre el corazón y la mente de los jóvenes.

La grave crisis que vive el planeta nos coloca en una encrucijada sin parangón en la historia de la humanidad. Es por lo tanto el momento para delinear un ámbito espiritual para configurar los procesos creativos y educativos de cara a las problemáticas del siglo XXI, donde la obra artística no sea un elemento aislado de la vida, sino algo que forme parte de un todo claramente distinguible. Un modo de estar en el mundo, en un universo que no existe por casualidad, donde la idea de un diseñador cósmico es posible. Un lugar donde la imaginación, la emoción, la racionalidad y la espiritualidad sean elementos activos, permitiendo elaborar una poética desde un estilo de vida distante de la soberbia y el egoísmo producto de nuestros apetitos y pasiones, que provocan la violencia y la corrupción que aqueja en mayor o menor medida a todas las naciones del mundo; fenómenos que al parecer seguirán escalando hasta alturas insospechadas.

Agustín Benelli

Exposición Instituto Chileno-Norteamericano de Cultura (Portada catálogo, año 2002)